... o lo que sale con un trozo de cartón y un permanente. En esta habitación mía de Aberdeen se siente la presencia de una de sus anteriores inquilinas: Rebeca, alias "la Rebe" que fue dejando parte de su arte por toda la casa, acompañado también por las armas del crimen. Así que ahora voy yo y aprovecho.
Ultimamente he tenido esto bastante abandonado, pero la verdad es que con el curro estoy bastante ocupada y tampoco tengo mucho tiempo para sumergirme en mis pensamientos filosóficos varios. Supongo que es algo positivo esto de la ocupación mental...
Y qué decir de Aberdeen. Fría, oscura, gris como el granito de sus paredes... Parece la descripción de algún lugar en que ninguno querríamos estar. Y, en cambio, tiene su encanto. Este sitio deslumbra en cuanto sale el sol a pasear, pena que haya venido a parar aquí en invierno. Aún así puedo hacerme a la idea de lo precioso que se pondrá todo esto cuando los días duren muuuchas horas y todo se vista de verde primavera.
Por el momento os dejo aquí unas fotillos, para que os hagais una idea.
PD: al menos ya no está nevado y se puede andar como personas normales :)
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