miércoles, 7 de octubre de 2009

_Otoño_



"Cenicero, mi cenicero
mi corazón, mi cenicero..."

Ya empiezan a caer las hojas de los árboles. Pronto se llenarán las calles de hojas secas y quebradizas, marchitándose al son de los acordes del otoño, que siempre llega, para acabar con todo lo que la primavera con tanto esfuerzo creó. Y ante este desolador cuadro, cuando parece que todo llega a su fin, los troncos de los árboles desnudos sobreviven así al invierno y a sus inclemencias, esperando, aguantando hasta que la primavera y sus benevolencias vuelvan a bañar con su luz sanadora sus fríos cuerpos.

Así como los árboles al otoño y al invierno, resisto con el alma desnuda a que llegue mi primavera y así resurgir, también yo, de mis propias cenizas...

1 comentario:

  1. ... y los autobuses vuelven a llenarse de las mismas personas pero con caras distintas.

    Aún así seguimos aquí, perennes, como las hojas de algunos árboles...

    (Me ha molao tu texto :-)

    Por cierto, prueba mejor con Carl Off ;)

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