miércoles, 16 de diciembre de 2009

_Una tarde de diciembre_





Un lunes, tarde fría de diciembre, una chica va en el tren escuchando la radio. Al otro lado de la ventana mucho frío, cuesta abandonar la calidez del vagón. Se pasa de parada porque ha decidido no ir a dónde debía. Pasado un rato ella se toma un café sin prisa, sentada frente al enorme ventanal de una cafetería que únicamente comparte con otro cliente. La música está baja, se asemeja a un acogedor murmullo de fondo. Allí fuera, unos cuantos hombres llevan cosas de aquí para allá, entregados a la construcción de un rascacielos con una fachada enteramente hecha de cristal. La chica lee un libro que transcurre en la India y se sumerge en su lectura mientras se imagina entre reyes y sultanes, hechiceras y maleantes, pérdida entre los olores y los ruidos de algún bullicioso bazar... El cerrarse de las tapas del libro la devuelve a la realidad y con el último sorbo del café se pone la chaqueta y coge el bolso, preparada para enfrentarse al frío intenso que reina en la calle. Sus pasos la llevan desde la cafetería a un parque vecino, dónde se entretiene a liarse un cigarro mientras observa al pavo real que se pasea tranquilo cerca del estanque. Qué bello bicho este. Un chico que pasea a su perro se sobresalta al emprender repentinamente el vuelo el antes sosegado animal y lanza un grito de sorpresa. La chica reprime una carcajada mientras le da una calada al cigarro. El chico parece caer presa de una prisa repentina y desaparece en dirección contraria detrás de su perro. Ella continúa bordeando el gran estanque, con paso lento a pesar del frío. Observa a las personas que se pasean también por el y piensa en qué las habrá llevado allí mientras se va consumiendo su cigarrillo. Sus pasos la llevan hasta la calle principal de la ciudad, donde los árboles están decorados con montones de luces azules, que se encienden y apagan continuamente. La calle está repleta de gente que viene y va, deteniéndose en los escaparates y entrando a las tiendas para comprar los regalos de Navidad. La chica se pasea tranquilamente por la calle, feliz de impregnarse un poco del espíritu navideño. Y entra en una librería que le gusta mucho, una en la que se puede coger un libro y sentarse plácidamente a comerse un croissant. En la sección de viajes hojea un par de libros de la India y Japón y su imaginación vuelve a volar, preguntándose como será la sensación de ver todos esos lugares con sus propios ojos. Cuando ya ha tenido suficiente viaje mental, vuelve a salir a la calle, donde cada vez hace más frío y son solo las 6 de la tarde. Decide coger el metro para volver a casa.
Un poco más adelante ve a un chico en el escaparate de una tienda que le parece conocido, aunque una segunda mirada la convence de lo contrario. Continúa caminando hasta detenerse en un paso de zebra, esperando a que el semáforo se ponga en verde. Un chico aparece a su lado, deteniéndose a esperar también al semáforo. Ella le mira y se da cuenta de que es el mismo que creyó haber visto antes. Efectivamente, así es. Comienzan a hablar y resulta que los dos pasean sin rumbo fijo por la ciudad. Y también resulta que los dos deberían de estar en el mismo lugar, del que por algún motivo han decidido escaparse por una tarde. Así que deciden pasear juntos. Sus pasos les llevan hasta la parte vieja de la ciudad, perdiéndose en sus calles hasta llegar a una librería, en la que él entra con intención de comprar algún libro. Se entretienen un rato en la tienda pero salen sin nada. Deciden ir a tomarse algo y acaban en un bar bebiendo cañas y hablando durante un par de horas. Al fin pagan y se dirigen al metro, rumbo a casa.

Me encanta Bilbao cuando llega el frío y se acercan las Navidades. Siento que las luces que decoran la ciudad me devuelven el espíritu navideño :) Es bueno salirse de la rutina y decidir cambiar una tarde en el laboratorio por un paseo por mi ciudad... Y aún mejor no ser la única en hacerlo ;)

http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/prensa/20061202/vizcaya/bilbao-viste-navidad_20061202.html

2 comentarios:

  1. Muy bonita ^_^
    Suele pasar, eso de no ir a donde deberías y acabar encontrandote con alquien que también lo ha hecho xD.

    Sobre las canciones, te diré que un amigo mío pensaba que nos conocíamos de toda la vida.

    Un besito

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  2. Quiero leer mas!

    Tu piccolina :))

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