jueves, 28 de octubre de 2010

_Fórmula mágica_


¿Cuál es la substancia de los sueños? ¿De qué está hecha la felicidad? 

Ojalá tuviera la fórmula química para inyectármela por vena cada vez que me asalta el síndrome de abstinencia. Según lo que sé, tiene algo de dopaminas, endorfinas, oxitocinas, serotoninas... Todo -inas, estas hormonas que todo lo controlan. Esas pequeñas hijas de su madre totalitarias que te dictan "hoy si" y "hoy no". 
¿Dónde habrá que pulsar para producir todas estas moléculas a raudales? ¿Qué botón se me ha apagado? Soy una yonki de la felicidad y ahora que sus efectos flaquean muero (o mato ?) por mi siguiente dosis. Quien crea que estar muy contenta solo tiene aspectos positivos se equivoca. Hay veces que llega a estar una tan colocada, que cuando se queda sin su chute es un de culo, cuesta abajo y sin frenos. De lo más alto a lo más bajo a la velocidad de la luz, para que luego digan que no puede una viajar tan rápido. El síndrome de abstinencia más loco que se conozca. Y es precisamente en esos momentos en los que no siento sus efectos, cuando caigo en la cuenta de lo colocada que me paso la mayor parte del tiempo... 

Lo que me lleva a plantearme ciertas cosas. ¿Cuál es el estado natural? ¿La felicidad o la tristeza? ¿O ese punto intermedio tan mediocre y, a la vez, tan socorrido? Si hay hormonas que te hacen feliz, ¿Hay hormonas que te hagan infeliz? ¿O la "ausencia de felicidad" (no confundir con infelicidad) es el estado natural por defecto?
¿Hay personas que por naturaleza producen mayores cantidades de hormonas felices? ¿Es eso lo que diferencia a un optimista de un pesimista?
Y lo más importante de todo ¿Se puede todo reducir a la bioquímica? 

...

Menos mal que existe eso llamado música. Yo creo que algunas canciones incluso contienen cierta parte de esa fórmula mágica...

Os dejo en compañía de Hooray for Earth y su Surrounded by your friends. Enjoy!



PD: Como buena bióloga nini que soy, debería de dejarme de divagaciones semi-filosóficas y ponerme a revisar lo que dice la literatura científica de todo esto... Pero hijo, no hay nada más coñazo que un artículo científico, qué pereza jaja. 

sábado, 9 de octubre de 2010

_Renegade_

Te estoy soltando para ver si te aferras a mí. Estoy dudando lo que es imaginado y lo que es real.
En nuestra habitación, entre las formas que creía conocer, una guillotina, una almohada de plumas como nieve.
He llegado hasta este punto de espionaje más allá de tus fronteras. Soy todo oídos para buscar pistas y señales pero no puedo oír la canción que cantas mientras intentas aliviar. ¿Por qué susurras mientras las bombas caen?

No seas duro conmigo, no puedo evitar lo que hago.

Hola de nuevo. Te había enterrado, ¿Dónde estuviste?
Mi renegado, regresaste del laberinto. Al contrario que yo, buscaste cosas que podían encontrarse y el hilo que guía durante tiempos oscuros.

No seas duro conmigo, no puedo evitar lo que hago.

Cuando los pensamientos habían superado las palabras, durante las primeras horas no pudimos lograr establecer quién resultó más lastimado.




Clara prueba de que en ocasiones una canción en inglés si que gana cuando se entiende el significado.
Simplemente geniales estos reyes de la conveniencia.